Grupos fascistas ucranianos derribaron este domingo por la noche una estatua erigida en honor al revolucionario soviético Vladimir Lenin en Járkov, la segunda ciudad más grande del país, según informó la Policía local.
Para lograr derribar el monumento, los manifestantes treparon hasta la base de la estatua y serraron las piernas. Por otra parte, otro grupo se ayudó de unos cables de acero –atados al cuerpo de Lenin– para lograr tumbar este símbolo de la época socialista.
En las redes sociales circulan imágenes de la caída del monumento a Lenin e, incluso, varios usuarios han subido vídeos a YouTube donde se puede ver el momento exacto del derribo.
El ministro del Interior de Ucrania, Arsén Avákov, ha descartado cualquier posible persecución de los culpables del asalto, ya que “el gobernador de la provincia de Járkov ya había ordenado demoler este monumento” previamente, según ha afirmado a través de su cuenta de Facebook.
Un nuevo gesto por parte de los golpistas que demuestra la connotación fascista del ejecutivo ucraniano, cuya finalidad es incitar a la violencia y la regresión del país a través de políticas autoritarias en lo social y de posicionamientos capitalistas en lo económico.
